A pesar de estar presenciando una reactivación económica y social paulatina, por el momento el sector de la educación se queda en casa.

No obstante, la difícil situación económica por la que atraviesan nuestras familias, que se ha agudizado para muchas como consecuencia del #covid_19, existe un salvavidas que hoy la institucionalidad pone al servicio de los Antioqueños, y que sin duda, permitirá el regreso a clases de miles de estudiantes, así sea de manera no presencial.
El beneficio de matrícula cero, “tiene un valor cercano a los $20.500 millones de pesos, con el que se asegura la permanencia de los estudiantes de educación superior en el segundo semestre de 2020, y se garantiza especialmente con tres acciones: a. Pagando el valor de la matrícula, b. Flexibilizando los requisitos para que los estudiantes becados no tengan obstáculos, y c. Con la entrega de tres mil computadores Chrome Book.”

Esta es una importante apuesta de los gobiernos locales, departamentales y nacional que le permite a un gran número de personas, especialmente jóvenes, asegurar la continuidad de sus estudios, y es que hay que ver esto no solo como una estrategia para evitar la deserción, sino también, como alternativa para que nuestros jóvenes no pasen a engrosar los círculos de delincuencia, contener el desempleo y contribuir al tratamiento de los problemas psicológicos y emocionales que se están presentando como consecuencia de la cuarentena, que ya se aproxima a los 7 meses.

Entre las instituciones beneficiadas se encuentran las tres IES públicas de Medellín: ITM, Colegio Mayor y el Pascual Bravo, además del Politécnico Jaime Isaza Cadavid, la universidad de Antioquia y la Nacional, en las que “El valor del beneficio alcanza un aporte del 80% a la matrícula del estudiante, el cual entra a sumarse al 20% ya otorgado por el alivio socioeconómico TdeA. Se precisa que los estudiantes beneficiarios fueron quienes de acuerdo con la información suministrada en el momento de matrícula 2020-1 cumplían los criterios solicitados por la Gobernación de Antioquia”

A pesar de la cobertura que tiene el programa matrícula cero y los miles de beneficiados, los estudiantes de algunas instituciones como el “POLI”, la U de A y la Nacional han estado realizando huelgas de hambre para exponer su inconformidad respecto al estudiantado que no aplica para adquirir el beneficio. Los rectores se han pronunciado, y en el caso de la U de A y La Nacional, han logrado grandes inversiones para sus comunidades estudiantiles, “La Universidad de #Antioquia informó que, gracias a la voluntad expresada por el gobierno nacional, departamental y municipal, está garantizada la matrícula cero para la totalidad de los estudiantes de pregrado de la Alma Máter en el próximo semestre”

La huelga de hambre fue levantada de las instituciones educativas, después de que le fueron realizados exámenes de covid-19 a cada uno de los manifestantes, quienes expresaron “recibimos la noticia con mucho agrado y con mucha hambre pues estábamos a la espera de una comunicación pública desde hace una semana, pero es bueno saber que la presión dio sus resultados en la medida que hace una semana la Gobernación de Antioquia, decía que no había recursos para la Matricula 0 y ya hoy aporta 2,800 millones para la Universidad de Antioquia”.

Es preocupante que en medio de la contingencia sanitaria que estamos viviendo se presencien este tipo de actos que ponen en riesgo la salud y orden público, pero, es igual de preocupante los problemas socioeconómicos que rodean el acceso a la educación superior, y en general para este segundo semestre 2020, como lo mencioné en el anterior artículo de opinión, el problema no solo radica en las matrículas, sino también en el difícil acceso a la tecnología y al internet de los niños, niñas y jóvenes de nuestro departamento, por eso el reto no es solo pagar la matrícula, sino además garantizar que en medio de esta #pandemia puedan conectarse a #internet de manera efectiva, especialmente desde la ruralidad, donde se presenta la mayor falta de cobertura.

En tiempos de pandemia muchos sectores fueron insistentes y unieron esfuerzos para no solo asegurar el curso de los semestres estudiantiles, sino brindar las herramientas necesarias para que los estudiantes puedan cursar y algunos culminar sus estudios. A pesar de no alcanzar a beneficiar al 100% de los estudiantes por falta de presupuesto, especialmente de la #gobernación de Antioquia, se logró impactar a miles de estos, especialmente de los estratos 1, 2 y 3.

Ahora los gobiernos y todos los sectores económicos y sociales debemos seguir insistiendo en el autocuidado, el retorno a las calles para algunos ya es una realidad, y para los que no, solo queda seguir promoviendo ambientes propicios para que puedan realizar sus actividades desde casa, fomentando hábitos de vida saludables, buena convivencia y, sobre todo, paciencia mientras llega la anhelada vacuna, que será la única que quizás nos permita regresar a la normalidad.

Luis Gabriel Gómez Grisales
Diputado de Antioquia